Recuerdo como si fuese ayer la reacción de mi hijo Martí pidiendo quitar el dvd de «Harry Potter y la piedra filosofal» al ver la escena en la que el gorro parlante de Howards decía aquello de: «Griffindorf!».
«Mi gozo en un pozo», pensé. Con lo que nos gusta en casa la magia, creer en lo increíble, en aquello que no puedes ver, volar de un lado para otro y tiro porque me toca. Pues nada, parece que Harry Potter no iba a ser su saga favorita por el maldito gorro del demonio. Pero no, una vez más me equivoqué…cada cosa a su tiempo y cada niño a su ritmo. Martí creció y me pidió volver a ver el film y no solo eso, sino que también quiso ir al espectáculo del mago Jorge Blass, ver los videos de youtube de «Un papá mago» y pedir a sus majestades los reyes magos de oriente la auténtica varita mágica de Harry Potter.
No hay día que pase que no convierta a su hermano pequeño en rana con dicha varita, que haga aparecer monedas de chocolate de la nada o que pueda volar como Superman pero sin capa.
Y es que cuando lo veo así de entusiasmado, no puedo evitar acordarme del día en que le regalé el anillo mágico de «linterna verde» para su primer día de colegio en P3, y como por la tarde volvió llorando diciendo que le había engañado, que un amiguito suyo le había dicho que aquel anillo no hacía magia. Imagino que el final de la historia lo conocéis, pero sino es así, os lo recuerdo: Hice un llamamiento en mis redes sociales, pidiendo que el que creyese en la magia, se lo hiciese saber a mi hijo Martí.
Aquí tenéis lo que pasó.
Exacto, magia en estado puro.
Tal es la magia en nuestro hogar, que Martí no solo ha visto ya varias películas de la saga Harry Potter, sino que son sus pelis de cabecera en los míticos domingos de «tarde+peli+sofá+manta» junto a otros clásicos como «Jumanji» o «Los goonies».
Pero lo mejor está por llegar, y es que Martí aun no sabe la sorpresa que le preparo.
El día 1 de Abril en el palau Sant Jordi tendrá lugar un evento de postín: La proyección de «Harry Potter y la piedra filosofal» en pantalla gigante y música en directo con la orquesta sinfónica del Vallés, con 94 músicos y un coro de 24 cantantes. Una gira mundial para un evento único, inigualable y que ningún cinéfilo y amante de la magia y de la saga de Harry Potter debería perderse. El mes de Enero aterrizó en Madrid y fue un éxito tanto de crítica como de público, así que os dejo este enlace por si os apetece vivir el mágico evento con vuestras propias carnes.
Ni os podéis imaginar las ganas que tengo que mi hijo Martí abra el sobre que nos enviará el búho proviniente de Howards con la invitación especial para la película. Y entonces solo nos quedará coger el maletín mágico de Jorge Blass, la varita de Harry Potter, el anillo de «Linterna verde» e ir «volando» hacía el Palau Sant Jordi.
Sí, porque en mi casa a pesar de que ninguno de nosotros 4 tenemos alas, no las necesitamos para volar.
Os lo aseguro.
¡Allí nos veremos! No nos lo vamos a perder :))))
que PRECIOOOOOSO y siiii yo creo en la magia, porque MAGIA puede estar en el más pequeño detalle (incluso en que salga el sol un dia que estas muy triste) ……ya nos pondreis los dientes largos con el espectaculo!! que seguro va a ser espectacular ^_____^
Espero que lo paséis muy bien y sea una noche mágica!!
Hola y como estuvo? Ha llegado a mi ciudad y esta un poco costosa la entrada..