Martí, he de confesarte algo: Hace tiempo que pienso que eres lo más parecido a un tren. Ya apuntabas maneras de muy pequeño, empezando con ese tren del «Ikea», y es que cómo te encanta montar esas vías, poner el tren en marcha e imaginar que te vas al camping, verdad? Pero que mala pata que los reyes magos del año pasado se despistaron y no te trajeron aquel tren…Sin embargo que ilusión te hizo tu primer día en el «cole de grandes» cuando viste allí el tren, y desde entonces, cada día que te voy a buscar y te pregunto que has hecho en el cole, ya puedes haber hecho un millón de actividades apasionantes, que me respondes siempre lo mismo: «He montado las vías del tren!».
Iluso de mi mi, yo me he pensado siempre que eres un tren tipo «Chuggington», » Thomas», «Dinotren» o incluso el «Polar Express» cómo tu padre, pero…ups! Nada más alejado de la realidad…Qué tren eres Martí? Pues esta claro, el » Miracle Express».
El «Miracle Express» es un tren que va muy rápido, el tren de la magia, el tren que puede con todo, el tren del nervio, de la impaciencia… uno de los trenes más rápidos del mundo, o del parque, mejor dicho. Además, es el tren que sale en el videoclip de la canción de «Breakthru» de Queen, y es que con sólo 2 años, el friki de tu padre te ponía vídeos de su grupo favorito y a ti sólo te gustaba «el que sale el tren» y «el que sale la luna», o sea, «El hijo de la luna» de Ana Torroja que le encanta a mamá. Tus dos grandes pasiones: El tren y la luna.
Pero hace ya tiempo que este tren que por allí por dónde pasa deja huella, a muchos incomoda, a muchos incluso molesta. Entonces no se suben en el tren, miran para otro lado, o simplemente evitan estar cerca de las vías cuando pasa. Es lo que tiene tener 3 años, ser un nervio y además ser lo más parecido al «Miracle Express». No sé que decirte hijo, yo soy el primero en marearme cada dos por tres en ese tren, y muchas veces te reconozco que bajo atacado de los nervios antes de la parada prevista. Sin embargo, detrás de esa mirada preciosa achinada con la que me deleitas cada día, sé que me entiendes, incluso espero que entiendas a toda esa gente que cree que eres demasiado rápido, demasiado….demasiado todo. Te reconozco que yo a veces desearía que fueras un poco más «Polar Express»…ya me entiendes. Entonces me enfado conmigo mismo, y me enfado tanto que me voy directo a taquillas para comprar todos los tickets existentes y hacer el viaje juntos. Incluso tu hermano Mario de 6 meses es el primero que quiere subir al tren, es tu mayor fan, lo sabes, verdad?
Así que Martí espero seguir viajando mucho tiempo en tu tren, sólo te pido que sigas cómo ahora, con esa generosidad, con esa ilusión, con esa energía, con esa imaginación, con esa picardía, y sí, con esa velocidad. Porqué tener un hijo que es el mísimisimo «Miracle Express» es y nunca mejor dicho: Un milagro.
Te quiero Martí.
Y pensar en lo bonito que será dentro de unos años, cuando Martí pueda leer y comprender esto, que le quieres tal y como es… Demasiado todo. Demasiado movido, demasiado emotivo, demasiado… niño. Ojalá todos los niños tengan a su lado padres y madres que les quieren porque son DEMASIADO. Porque son, como bien dices, milagros. Gracias, como siempre, Carlos, por decirles a tus hijos que les quieres, si todos nos dijeramos un poquito más que nos queremos, el mundo sería un lugar mucho mejor.
muchas gracias por las palabras Teresa. La verdad es que adoro a mi hijo, y cualquier cosa que creo que es injusta de su entorno, me afecta, y quizás a veces demasiado. Cada niño es como es, y la gente debería respetarlo…y sobretodo ponerse en la piel del niño. Muchos besos y gracias de nuevo:)
M ha agradat molt. MOOOOLT!
moltes gràcies guapisisma!!! petonets familia!!!! muakaaaaaa!!!!!!!!
Quien no se quiere subir a ese tren?. tú ni caso, es un tren precioso, alegre, simpático, que tiene de malo ser rápido?,es un tío genial, como su padre. Aunque no te lo parezca, el que conduce el tren eres tu.
no sé como lo haces tía Maite, pero siempre me tocas la fibra…. 🙂 Sí, quizás sea yo el que conduzca el tren, pero a ti siempre te veo en un vagón sentada en un vagón entusiasmada…y no sabes cuanto te te lo agradezco. 🙂
Muchos besos
Me ha encantado!!! «If I could only reach you, if I could make you smile…» 😀
Tú y yo compartimos muchas cosas 😉
muchas gracias!!! Por cierto, ya te sigo en el facebook 😉 abrazos!!!!!!
¡Que bonito! Saber que tu padre te quiere de esa manera. Tal y como eres, es lo más bonito del mundo, porque no te intenta cambiar, no deja que nadie le juzgue. Los niños son un pequeño milagro de la vida y tu tienes la suerte de tener dos en casa.
BESOTES
muchas gracias Patri!! La verdad es que no quiero cambiarlo para nada pobrete, aunque te reconozco que en ocasiones me mareo y me bajo del tren, je,je
Muchos besotes guapa
No dejes q nadie critique nunca ese tren tannnnn bonito!!!!! Pa gustos los colores, y el q no quiera que se suba al Villa lentorro, aunque te aseguro q el viaje no será tan interesante! Viva el ave!!!! Además, de repente un día, el ave será superado por cualquier otro tren y tu miracle express parecerá el Villa lentorro… Y entonces le querrás más aún si cabe. Y el te querrá por siempre porque cuando era como el ave su papi siempre estuvo a tiempo en la estación!!!! 😉
Cuanta razón tienes Patricia, y que bonito todo lo que me dices. Muchas pero que muchas gracias, de verdad. Me ha gustado lo de la estación, sí, allí estoy siempre, je,je. 🙂
besos
«Demasiado» es una palabra creada para ser utilizada por débiles e insulsos. Nunca he creído que algo placentero, divertido o mágico sea «demasiado» y, si se trata de dolor, malestar, irritación, tristeza, en fin, cuando creamos que se acerca a «demasiado», elaboremos una estrategia para transformarlo en una experiencia positiva.
Ah, por cierto, si alguien cree que un niño es demasiado movido, quizás sea porque el sujeto en cuestión es ya demasiado lento… sin acritud…
Jambo, no me cansaré de decirlo: eres muy grande!! y tus palabras van a misa!!!!! Me siento afortunado teniéndote cerca, y sobretodo, me siento afortunado que seas mi Pepito Grillo….1000 gracias:)