Siempre he pensado que el que escribe cuentos, guiones, libros, pinta cuadros, hace esculturas o cualquier otra cosa parecida…tiene un montón de hijos. De acuerdo, a las historias no hay que educarlas día a día e intentar que sean felices, pero también se les tiene que tener un inmenso amor y sobretodo, mucha dedicación. Las historias son la vida y la vida son las historias….por lo tanto que mejor que tener un montón de hijos. Martí y Mario tienen un montón de hermanos mayores en forma de libros, guiones y cuentos…por eso el otro día me decidí a presentarle a Martí unos de ellos: El corto en 35mm «El Tercer rey» , del cual hice un guión hace ya mucho tiempo, en una galaxia muy muy lejana.
Fue algo así como: «Martí…quieres ver una peli que hizo el papa hace tiempo?» Respuesta suya: «Noooo, el Pocoyo, quiero ver el Pocoyo» . Mi cara? pues un poema…sin embargo insistí, le comenté que salían unos niños y que era de Navidad y entonces… le cambió la cara, y es que Martí al igual que a su padre…escucha el cascabel, así que enseguida accedió a ver el corto. Cuando a los 10 minutos acabó, Martí me miró y me dijo: «otra vez!». Os imagináis mi cara de alegría? Mi hijo, un fan incondicional de dibujos como «Doraemon»,»Mickey Mouse» «Pocoyo» o «Peppa Pig» y de cuentos como «Blancanieves», «Los 3 cerditos», «¡Mío!» o «Rolf y Flor», quería un «bis» del cortometraje escrito por su padre. Sí, por un momento me sentí como el capitán Carles Puyol levantando la «Champions»…entonces Martí al finalizar el corto me preguntó: «Pero no sale el rey?», y seguidamente me dijo: «Quiero ver el Pocoyo!».
Posiblemente Martí entendió cosillas de aquel visionado, no todo, pero mejor que sea así… la razón? Bueno, si le echáis un vistazo al corto, entenderéis porqué mejor que no lo entienda todo y que de paso, mejor que no lo vuelva a ver hasta que sea mucho más mayor. Y es que yo era consciente que si Martí no veía en breve el corto, deberíamos esperar a que lo viese mucho más tarde, por eso me encantó aquel generoso gesto de Martí, aquel instante, aquel momento. No hace tantos años que ese corto se proyectó en cines, y no hace tantos años que era yo el que lo visionaba con ojos como platos en la oscuridad de la sala. Me acuerdo de la escritura, fue muy dura, de la pre-producción, el rodaje…todo lleno de obstáculos, malos rollos, sin embargo, mi hijo, nuestro hijo…finalmente vió la luz en la sala 10 de los cines Icaria…fue apoteósico.
Por eso cuando después de haber empezado con miedo a escribir en una hoja en blanco o cuadriculada de una libreta de «Buzz Light year» o «Miquelrius»…llegas a la meta o al punto dónde una vez imaginaste estar, te sientes como si tu hijo hubiese nacido. Sí, quizás la comparación es exagerada, sin embargo, cuando aquello que has escrito, aquello por lo que has luchado, aquello por lo que has sudado horas en una habitación llena de polvo…ve la luz, la felicidad creedme, es inmensa.
Los hermanos mayores de Martí son guiones de largos, cortos, libros, cuentos…etc y cada uno de ellos significa muchísimo para mi. Y a diferencia de las opiniones no deseadas que escucho cada 2 por 3 con mis dos hijos, con éstos prefiero que me digan cuanto antes que este guión me recuerda a la última «comedia romántica» estrenada en los cines, que al final de esta historia le falta picardía o que este cuento me suena a uno de unos escritores que eran hermanos y se apellidaban Grimm…que no llegue al final del camino, me piense haber hecho algo chulo y fresco y entonces me digan: «Esto es cómo en Hamlet, no?». Y me vaya directo a tirarme del rascacielos más alto…
Todos los hermanos mayores de mis hijos tienen su historia, un proceso, muchas alegrías y algunas penas. Sin embargo, la satisfacción por haber llegado a buen puerto…es infinita…y es que ya lo decía Stephen King al referirse al reto de estar delante de una hoja en blanco: «El momento que da más miedo es justo antes de empezar…en adelante solo puede ir a mejor!». En adelante quedan 2 hermanos…Sí, está vez serán 2 hermanos pequeños los que pronto verán la luz, y es que ya lo digo en este blog: Me encanta ser papá, pero sobretodo me encanta tener un montón de hijos.
Muchas felicidades por todos esos hijos que tienes. Es precioso ver como un hijo ve la luz, como poco a poco lo creas, toma forma y al final, en el instante en que sale, es como…. un sueño hecho realidad. Yo también espero tener muchos hijos.
BESOTES
claro Patri!!!!! ya tienes un montón de hijos y más que tendrás!!!! 🙂 muchos besitos guapa!
¡Enhorabuena por la cantidad de niños que te van a rodear!
Muchísimas gracias!! habrá que jugar a la lotería y comprarse una mansión para que quepamos todos… 🙂
Genial el corto….»Tus papas son los reyes…» «¿Los de España?» «No hombre, esos no que no sirven para nada» ….jajjajjaja. Qué bueno!!